martes, 23 de mayo de 2017
Definiciones.
Podría decirse que tu esencia es como el impacto de las olas contra el acantilado cuando deciden terminar con su vida, atronador pero apacible al mismo tiempo.
Como las noches de tormenta en que no solo llueve fuera de casa pero que al final, son solo eso, noches de tormenta que se tornan arcoiris cuando el sol vuelve a brillar.
Podría definirte de muchas formas, pero ninguna de ellas podría reflejar la realidad. Porque no entiendes de palabras, no entras en el canon, no eres lógica ni impulso, ni agua, ni fuego, ni tierra, ni aire. Eres etéreo y eterno a partes iguales.
miércoles, 15 de marzo de 2017
Feminismo.
domingo, 8 de mayo de 2016
Los guardianes del alma.
Cada guardián custodia un fragmento de los siete que quedaron y el tamaño de este varía dependiendo de la confianza que yo haya depositado en el guardián.
El primer fragmento, el más pequeño, lo custodia un guardián al que fácilmente podría sustituir, alguien en quien confío pero que no tendría problema en dejar ir. En cambio, el séptimo trozo está entre las manos de mi guardián más preciado, un guardián tan peculiar que sus características se escapan al entendimiento humano pero, sobre todo, un guardián que tiene su propia historia.
Éste guardián, apareció en mi vida casi sin querer y en un abrir y cerrar de ojos consiguió que le entregara algo que no le había vuelto a confiar a nadie antes que al hada porque tenía muchísimo miedo de que ese fragmento, el más valioso, el más grande, el que contiene el latir de mi corazón, se resquebrajara y con el, toda mi vitalidad huyera en vano.
El guardián tenía una relación peculiar con el alma y un afán de protección casi irracional pero tenía un gran defecto o una gran virtud: Era un inconformista, no le bastaba con un fragmento de mi alma, él siempre quería más y como la mía ya estaba completamente protegida, iba en busca de almas perdidas dejando mi mayor tesoro al descubierto y partiéndolo en mil pedazos con su marcha.
El problema fue que al cabo del tiempo volvía, siempre volvía. Lo hacía con soplete en mano y a pesar de que las cicatrices eran visibles, reconstruía el fragmento con tanta facilidad que era prácticamente indoloro.
Pero un día, cuando mi alma no podía soportar un solo golpe más, el guardián vio un alma en pena vagando, pidiendo ayuda y una vez más se marchó causándole un dolor inhumano a todo mi ser y justo cuando creía que iba a volver, porque siempre volvía, mi alma se dio cuenta de que lo había perdido para siempre, se percató de que ahora su objetivo era sanar al alma apenada como un día lo estuvo ella misma y aceptó su porvenir.
La mayor sorpresa del alma fue despertar a mitad de la noche y descubrir que entre las sombras, estaba su guardián, que no la había abandonado sino que simplemente las condiciones habían cambiado. El alma era consciente de que la mayor parte de la atención del guardián estaba dirigida hacia su gran tesoro pero que de tanto en cuando, su preciado guardián volvía a echarle un vistazo para asegurarse de que no sufría ningún daño y se quedaba acurrucado a ella hasta el amanecer.
domingo, 28 de febrero de 2016
El paraíso.
Sin pensármelo dos veces me habría precipitado al abismo de tus labios.
Hubiera cogido carrerilla y con los ojos cerrados, hubiera saltado al precipicio ubicado en tu sonrisa.
Habría muerto por recibir la calidez y la suavidad que esconden las comisuras de tu boca y éstas me habrían servido de punto de apoyo para mover el mundo.
Pero me encontré con que se habían cerrado para mi, que no eran tus labios lo que me esperaba sino esas blancas y perfectamente alineadas paredes que me masticaron el alma hasta dejarla hecha añicos y que pararon mi caída a la nada con un golpe seco, atronador y asombrosamente indoloro. No fue el golpe lo que dolió, fue el darme cuenta de que la entrada al paraíso se me había denegado hasta nueva orden y que esa orden no iba a llegar nunca
jueves, 11 de febrero de 2016
8. El encuentro.
martes, 17 de noviembre de 2015
Gracioso.
jueves, 8 de octubre de 2015
7. La apabullante espera.
Han pasado ya 5h de clase y aún no sé nada de él ¿y si se ha olvidado? No dramaticemos, quedan 2h más. Acaba de tocar la campana así que salgo al pasillo a tomar el aire pero al cabo de unos minutos un profesor se dirige a nosotros diciendo que la profesora está enferma y hoy no podrá dar clase. La verdad, esto me alegra, no tenía la cabeza ahora mismo como para dar historia. Por lo tanto, entró en clase con la intención de recoger mis cosas e ir a la biblioteca y al empezar a guardarlo todo en la maleta, veo un post-it encima de la mesa. "Ve a tu taquilla, hace horas que un mensaje te espera allí." No me extraña que esté en la taquilla, cada día paso por allí a primera y última hora pero hoy tenía conmigo todo lo que necesitaba y no era lógico ir allí. Si no me hubiera puesto esa nota, no hubiera ido.
Me dirijo a la taquilla, la abro y veo un sobre azul turquesa, lo cojo y me voy directa a la biblioteca para leerlo tranquilamente y sacar provecho de la hora libre.
"Hola pequeñaja, ayer al escribir la tercera carta estaba nervioso ya que pensaba en el momento en que nos veamos y, como habrás notado, se me olvidó decirte dónde va a ocurrir así que presta atención. Cerca de aquí hay un parque que parece más bien un bosque (ya que de parque solo tiene los bancos). En la entrada , a la izquierda hay un árbol que tiene la corteza hacia adentro simulando un pequeño banco propio. Espérame junto a ese árbol (si no lo encuentras, es el único que tiene flores moradas).
Pd: Espero impaciente a que sean las 22:00, por favor no llegues tarde, tengo muchas ganas de verte."
Sé perfectamente cuál es ese árbol, solía ir allí después de clase cuando las cosas iban mal en casa y me pasaba horas allí escribiendo y escuchando música. ¿Debe saberlo o será cierto que existen las casualidades?
**Como información adicional, me gustaría contaros que estoy subiendo esta historia a wattpad al igual que aquí, si os interesa seguirme por allí, mi perfil es "LittleReader98" y os dejo aquí abajo el enlace directo a la historia. (http://w.tt/1Lp90D1)