2. Sabe donde darme.

Sigo andando, asombrada de todo lo que sabe este chico de mi, y me doy cuenta de que ya he llegado a clase, doblo el papel, lo meto en la maleta y me dispongo a entrar en clase.
Ya están todos sentados, voy hacia mi sitio y me disculpo ante la profesora alegando que no me encontraba bien y por eso he tardado unos minutos más.
Me siento y me paro a observar a todos y cada uno de mis compañeros de clase, realmente ninguno de ellos me ha llamado mucho la atención en ningún momento, y pensar que alguno de ellos es el "admirador secreto".
Empiezo a crear hipótesis sobre quien puede o no ser mi "admirador" pero todas me parecen descabelladas, no me imagino que ninguno de ellos pueda saber tanto de mi puesto que prácticamente no hablo con ellos, además ninguno de ellos está nervioso y si yo fuera quien ha hecho esa carta estaría verdaderamente nerviosa.
Al cabo de un rato desisto y decido prestar atención en clase, la profesora está explicando el próximo ejercicio, cuando termina la explicación lo hago con impaciencia puesto que es de las cosas que mejor se me dan pero justo cuando lo estoy terminando suena el timbre que anuncia la siguiente clase.
Esta vez si recojo deprisa, estoy intranquila y necesito escuchar algo de música antes de la siguiente clase.
Cojo la maleta y salgo de clase antes que ninguno de mis compañeros y me dirijo hacia el patio, de repente noto un suave tirón en la mochila y me giro pero no hay nadie detrás de mi.
Saco el móvil y los auriculares del bolsillo y pongo la primera canción que veo, se que sea la que sea me gustará, me siento en uno de los bancos, dejo la mochila a mi lado y veo que hay algo pegado. Es un post it.

¿No pensarás saltarte la próxima clase y dejarme con ganas de ver esa carita de concentración que pones verdad?
PD: Por mucho que nos observes no vas a saber quien soy hasta que yo quiera que lo sepas.
PD2: Lo de que no te encontrabas bien no te lo creías ni tú.

Y sonrío, sonrío como una idiota, este chico sabe donde darme.