lunes, 2 de julio de 2018

Tiempo.


No eres tú lo que provoca mi llanto
es siempre el paso del tiempo quien me quita el sueño
Cuando destruye todo lo que toca rápido
Sin parar un segundo a escuchar mis argumentos.

Y al final no seré más que materia
Que ha sentido el vértigo de estar entre tus brazos
Y por depender de sus delirios de grandeza
Dejará este mundo convertida en mil pedazos.

No hay creatividad ni talento bajo este manto
de vulgaridad que no es más que un reflejo
de todo aquello por que apuesto y que dejo
Por no ser capaz de superar estos complejos.

Lucho por lo que quiero y cuando lo tengo me canso
Y es que no hay ambición si por naturaleza eres manso.
De la misma forma estás destinado al fracaso
Si hacia quien te valora es omiso tu caso.

Cuida lo que tienes y no lo perderás nunca
Pero tampoco pierdas de vista tu espalda
Que quien durante el día más se te acurruca
Será quien por la noche te clave la estaca.