miércoles, 23 de septiembre de 2015

Not even stars last forever.

Es cierto, ni siquiera las estrellas duran para siempre, de hecho la mayoría de veces lo que vemos los humanos es el espectro que dejan después de su muerte. ¿Y si es eso lo que vemos tu y yo?¿Y si lo que sentimos ahora es tan solo un espectro de el amor que habitaba entre nosotros?¿Y si la conexión que establecimos a lo largo de esos maravillosos años hubiera muerto dejando en nosotros el recuerdo? ¿Y si es eso lo que percibimos ahora?¿Y si tu amor fuera solo un recuerdo?Quizá tu corazón pertenezca a otra pero sigas anclado a mi por el estúpido pensamiento de que vas a hacerme daño, por la simple razón de que el pasado nos hace sentirnos seguros y porque sabes que te querré siempre. Quizá solo sigas conmigo porque tienes miedo a lo desconocido y es mucho más cómodo quedarte aquí, porque crees que soy la única que anhela oír tu voz cada noche, la que te echa de menos sin ni siquiera haber acariciado tu piel, la que crees que estará ahí para siempre. Y quizá por eso me perdonas cada uno de mis jodidos errores, cada una de las veces que te he fallado. Si es por obligación, sinceramente, no quiero que sigas a mi lado. Solo quiero que me quieras si es lo que tu quieres, solo quiero que sigas aquí si tu primer impulso al levantarte al menos una vez por semana es pensar en que te gustaría amanecer a mi lado o si al acostarte de tus labios sale un "te amo" al aire buscando a su dueña. No quiero que me quieras si no quieres quererme, no quiero que sigas aquí por no hacerme daño, no quiero que me quieras, no te quiero. Por supuesto miento. Claro que te quiero, si no no estaría pensando en ti a las 3 de la mañana cuando los monstruos que desde hace años no están debajo de mi cama vienen a visitarme y es obvio que quiero que me quieras pues te quiero pero no todo es tan sencillo ¿sabes?

No hay comentarios:

Publicar un comentario